Esta historia no comienza con un " Erase una vez..."
Lamentablemente el ya había tomado una decisión por los dos, no había marcha atrás, el se dio cuenta que no la amaba porque eran diferentes, le había dicho que no era suficientemente inteligente y estaba loca. El un viento sin destino, ella un ave que quería dejar de volar y hacer su nido.
Ella, se paró, giró y con las pocas fuerzas de su corazón, comenzó a caminar en un rumbo diferente, alejándose poco a poco de el, ella sabía que era la ultima vez que que lo miraba, fue el ultimo beso, el ultimo y definitivo adiós.
Al llegar a casa, se encerró en su habitación, prendió la radio y puso su canción favorita, como si no era suficiente era la misma canción que un tiempo atrás el la había dedicado cuando quería enamorarla. Mientras cantaba, sus ojos se llenaron de lagrimas y que caían de sus mejillas, acostada en su cama, tomó su almohada, apoyo su cara y en silencio gritaba con todas las fuerzas a su corazón "Deja de llorar, pronto lo superaremos", como alguna vez ya los habían hecho, aunque ella tenia una diminuta esperanza de que algún día de la nada llegue un mensaje suyo diciendo que la extrañaba. Lloró tanto hasta cansarse y quedarse sin aliento y dormida.
Pasaron varios días, semanas, meses, sin verlo, sin un solo mensaje, sin tener noticias de el, sin un "te extraño". estaba aprendiendo a vivir herida y comprendió que la vida no siempre te quita personas, también te aleja las que no necesitas, comprendió que podía vivir perfectamente sin el y que algún día encontrará a alguien a su medida, alguien que le haga entender porque no funcionó con nadie más, alguien quien entienda su locura, la acepte tal cual y no quiera cambiar su esencia...
