miércoles, 12 de octubre de 2016

¿Descubrimiento o encubrimiento?

Un poco de historia... 

Unos años antes del descubrimiento de América, los viajes marítimos portugueses a la India bordeando la costa de África y siguiendo el derrotero hacia el este a través del océano indico, sirvieron como un estímulo para otros navegantes europeos que creían que era posible llegar a las regiones de Asia oriental navegando hacia el oeste.
Cristobal Colón defendía la hipótesis de que el diámetro de la Tierra era tan pequeño que se podía alcanzar Asia navegando desde Europa hacia poniente. En 1492 consiguió el apoyo y el patrocinio económico de los reyes Isabel y  Fernado de Castilla y Aragón, que le autorizaron a organizar un viaje de exploración que lo condujo a la costa americana.
Fuera del descubrimiento por parte de Cristóbal Colón, actualmente existe evidencias de contactos trasnsoceánicos precolombinos, el primero bien testimoniado arqueológicamente que muestra asentamientos vikingos en Terranova antes del descubrimiento de Colón que fueron posteriormente abandonados sin mayor repercusión y por otro lado existen algunas evidencias materiales y genéticas que apuntan a que pequeños grupos de navegantes malayo-polinesios pudieron arribar a las costas de América del Sur, antes de la llegada de Colón. Sin embargo, en ninguno de los dos casos estos grupos tuvieron un impacto permanente, por lo que en cierto modo no se consideran un descubrimiento consciente de una civilización por parte de otra civilización

El viaje de Cristóbal Colón no resultó fácil para nadie, de hecho hubo conatos de amotinamiento, pero gracias a la presencia y las dotes de mando de Martín Alonso Pinzón se consiguieron resolver estas situaciones. Cuando ya se habían agotado todos los cálculos y previsiones realizadas por Colón, se oyó desde La Pinta el famoso grito de Rodrigo de Triana «¡Tierra a la vista!», dos horas después de la medianoche del 12 de octubre.

Los Reyes Católicos, particularmente la reina Isabel I de Castilla, decidieron ayudar a Cristóbal Colón en su proyecto de llegar a Asia por el oeste, atravesando la mar océana. El 17 de abril de 1492, Colón firmó con los reyes las capitulaciones de Santa Fe, documentos por los cuales se autorizó, sin financiar, la expedición de Cristóbal Colón a las Indias por el mar hacia occidente. Además se le concedieron a Colón una serie de prebendas y títulos, entre ellos: Almirante, Gobernador, Virrey y el 10% de las riquezas. También se firmaron varias provisiones y cédulas para que ayudasen a Colón en aquellas villas y puertos de mar a las que se dirigía. Una provisión fue dirigida a la villa de Palos de la Frontera por una sanción impuesta a algunos de los vecinos de esta villa.
El 23 de mayo de 1492, a las puertas de la iglesia de San Jorge de Palos de la Frontera, en presencia de Cristóbal Colón, fray Juan Pérez y las autoridades locales, se dio lectura a la Real Provisión, firmada por los Reyes Católicos, en la que se ordenaba a ciertos vecinos de la villa palerma poner a disposición de Colón dos carabelas totalmente armadas y aparejadas.
Ultimados los preparativos la expedición partió del Puerto de Palos, el 3 de agosto de 1492. La escuadra colombina estaba formada por las carabelas Pinta, Niña y la Santa María. La Niña y la Pinta fueron elegidas por los hermanos Pinzón y costeadas por el concejo de Palos, en cumplimiento de la citada real provisión.  La tripulación estaba formada por unos 90 hombres aproximadamente.
La expedición se dirigió hacia las islas Canarias, donde Colón visitó a Beatriz de Bobadilla y Ulloa, gobernadora de La Gomera, y además en la Gran Canaria hizo reparaciones en la Pinta en el timón y en las velas. Finalizadas las reparaciones, desde la isla de La Gomera continuó su travesía del Atlántico el 6 de septiembre.
 La isla estaba habitada por el pueblo lucayo o taíno. La primera oportunidad en la que los europeos utilizaron el término «indios» para denominar generalizadamente a los pobladores de América, palabra que deriva del error que cometieron al pensar que la isla Guanahaní se encontraba en la zona oriental del continente asiático, que los europeos de entonces confundían con India.
Los taínos eran una sociedad agraria organizada relativamente avanzada, pero no tenia oro que era los que los españoles buscaban, a pesar de la buena relación que habian tenido con los que ellos erroneamente llamaban indios, Colón ya pensaba en la posibilidad de esclavizarlos, Ellos no tenian armas ni conocian tomaban las espadas que les mostraban por el filo y se cortaban con ignorancia.
Fue en el segundo viaje donde los españoles querian asentar presencia española en los territorios descubiertos (aunque estos lugares ya fueron descubiertos por otros pobladores anteriormente)  Los escritos de este viaje registran algunas situaciones de abuso sexual contra mujeres indígenas. Regresaron a España ellos aun no habian encontrado el oro que buscaban.
En 1498 partieron nuevamente, hasta entonces solo habiar descubierto islas, llegando en este viaje a las Islas Margaritas, Cubagua y Coche en America del Sur  volvieron a España sin el oro que Colón les habia prometido, Colón fue arrestado por Francisco de Bobadilla pero el 25 de noviembre de 1500 fue puesto en libertad.
Colón habia perdido “sus poderes”, aún así decidió embarcarse en su cuarto viaje, pasó 88 días de tormenta, descubrió Jamaica, siguiendo al oeste descubriendo la isla de Guanaja en la costa de Honduras en america central.
La llegada de Colón, dio inició a la conquista de America siendo las más importantes la del Imperio Azteca por Hérnan Cortés y la del Imperio Inca por Francisco Pizarro, para los españoles y europeos fue el inicio de la conquista de america, para america fue el inicio de un gran invación, violaciónes, genocidio de mas 80 millones de personas que ellos llamaban indios, donde se establecio una jerarquía racial y un enorme saqueo de los recursos naturales del continente. Todo esto en nombre de sus reyes o el clero católico en nombre y amor de Jesús, conquistada a fuego y sangre.
Los españoles llegaron a América a imponer su religión Catolica, mataron a indios que enterraron unas estampas de sus Jesús y la virgen porque ellos querían que estos bendiciecen la tierra, aun sabiendo de sus ignorancia murieron sin culpa, condenados por sacrilegio ardieron en fuego, derrumbaron y saquearon templos de nuestros antepasados por considerarlos paganos y sobre las ruinas de estos levantaron templos católicos, no por amor a Jesús, sino por simple ego y ambición de poder, por el deseo de sentirse dueños de las tierras “conquistadas”.
  
Una visión romántica de la llegada de Cristóbal Colón a América (Dióscoro Puebla, 1862).